Descripción
Quetzalcóatl es el príncipe de Tollan, quien enseña oficios; cuando un ser humano utiliza el conocimiento para obtener una ventaja contra sus seres iguales (como por poder, ambición, o egocentrismo) la vibración de este ser disminuye haciéndose más denso. La densidad provoca que se materialice y llegue a la tierra (los cristianos lo llaman el “Pecado Original”). El materialismo es la oscuridad del mundo. Es darle más importancia a los bienes materiales que al desarrollo del alma, generando racismo, desigualdad, inequidad, intolerancia, deseo de poder, riquezas: la perdición de la humanidad. El poder, la ambición, el dinero son excusas para no escuchar a tu alma y “supuestamente” llenar el vacío se que tiene; sin embargo, el alma se alimenta de virtudes no de dinero ni bienes materiales. Entre más dinero se tenga, aumenta el vacio del alma generando una necesidad de mayor poder justificando cualquier crimen para lograr su cometido; el sufrimiento de las víctimas fortalece la oscuridad terrenal.
Según nuestros ancestros venimos a esta tierra como seres que tienen que aprender algo (el error que los materializo), si no aprendes o mejoras vas a renacer, nuevamente, en la Tierra hasta que cierres tus ciclos y aumentes tu vibración, para que al morir tu ser se desmaterialice y tu alma pueda llegar nuevamente a Tollan (o al cielo de tu creencia), junto con Quetzalcóatl. El camino en la Tierra es sumamente difícil porque reina la oscuridad, sin embargos si tienes éxito la recompensa es eterna y si fallas tus ciclos se van a repetir hasta que aprendas a vibrar en armonía, paz, respeto y amor; o hasta que la oscuridad se apodere completamente de tu alma, desapareciendo la energía pura de Dios, que existe en tu alma.” fami_custom_id=”f6419e87-5e2f08d3a4243″ responsive_js_composer_custom_id=”responsive_js_composer_custom_css_888876796″ css=”.vc_custom_1608562082985{padding-left: 0px !important;}”]
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